¿Qué opina el comercio talquino?
“Lo lamentamos porque nos va a afectar. Ojalá sea lo más corto posible, pero se veía venir, por las políticas erróneas aplicadas por el gobierno. Es decir, no hay controles sanitarios en la ciudad. Muy poca fiscalización o está mal distribuida. Por lo tanto, era muy fácil que llegaran casos externos”.
¿Qué está pasando con el comercio ambulante?
“Mientras nosotros tenemos mucha regulación, con lavado de manos, distancia social y límite de aforo, el comercio paralelo informal está en la calle sin control. Así fue con las ferias navideñas en las poblaciones.
No puede ser que el comercio formal pague las consecuencias de una mala política, siendo que nosotros cumplimos con toda la normativa vigente, pero hay más gente vendiendo en la calle. Los extranjeros se tomaron nuestro centro comercial y nadie dice nada. Si no hay una política de control, no podremos superar la pandemia”.
¿La restricción vehicular fue acertada?
“La restricción vehicular es respetada por las personas, pero no es lo importante. Un día que un auto no salga a la calle evita la congestión de tránsito pero no el problema sanitario, porque eso depende de que hay mucha gente en la calle. El problema es que la gente hace una vida normal, aunque la recomendación es que salga, pero a lo justo y necesario. Usted recorre el centro y la gente se pasea como en los mejores tiempos de salud. Las notarías y los bancos nadie respeta distancias. El auto control funciona a la mitad y así no vamos a superar esta crisis”.