Siendo integrante de la Asamblea de la Diversidad Territorial (ADT) del Maule (Ex MUS Talca) y en mi calidad de presidenta del Colegio de Profesores, cargo en el cual he sido reelecta con primera mayoría el 9 de diciembre pasado, fui convocada por las organizaciones sociales, culturales y medioambientales que conforman la ADT, para asumir este desafío de presentarme como candidata a la alcaldía de Talca. Lo cual asumí como un honor y un deber para mi comunidad, mis representados y mis amigos y amigas de lucha.
Con mis compañeros y compañeras observábamos hace rato el espectro político y a los posibles candidatos al sillón edilicio, donde todos y todas concluíamos decepcionados (as) que “eran más de lo mismo”, aquellos que teniendo banderas político partidistas no han estado a la altura de lo que el pueblo chileno y talquino ha demandado en las calles desde mucho antes del “estallido social”.
Ellos que siendo necesarios para el desarrollo de las naciones, hoy representan a un muy bajo porcentaje a la población chilena. Además, si nos deteníamos a observar detalladamente, nos dábamos cuenta que el 90% de los candidatos eran hombres, por lo que nuevamente se persistía en la idea de sustentar el “patriarcado” dominante en las áreas de poder. Todo ello, sin habernos consultado a nosotras, las mujeres, cuyos obstáculos que garanticen nuestra presencia y participación hemos ido sobrepasando, no sin una lucha potente desde nuestro rol como ciudadanas.
Desde mucho antes del despertar de Chile, en octubre de 2019, desde nuestras orgánicas nos hemos dedicado al trabajo en los territorios, en directa relación con las necesidades de las personas, lo cual ha significado que nuestras energías están y seguirán estando cerca de la gente. Por lo mismo y ya que no tenemos tiempo que invertir en otras cosas, es que siendo nuestra candidatura independiente en un cupo del Partido Humanista (PH), pretendemos presentarnos como una alternativa transformadora que potencie los cambios que nuestra ciudad requiere con urgencia.
El proyecto, el cual me toca liderar, no tiene un carácter personalista y corresponde al resultado de un trabajo en conjunto con las organizaciones de base a las cuales represento. Me presento ante la comunidad talquina, como una mujer luchadora y consecuente, madre y esposa, parte de una familia real y sencilla, trabajadora y comprometida, docente destacada del Liceo Marta Donoso Espejo y recién reelecta como presidenta del Colegio de Profesores de la comuna de Talca, con el poder del feminismo que pretende imponerse por sobre conductas patriarcales que aún no superamos como sociedad.
No pretendemos hacer promesas vacías y sin sentido, cansado está nuestro pueblo de tantas mentiras, de una alegría que llegó más para unos que para otros. De tantos abusos e injusticias que culminaron en el “estallido social” del 18 de octubre de 2019, cuyas demandas son el reflejo de que muchas instituciones no funcionan como se debe y que es hora de hacerles profundas transformaciones. Pero si hay algo que nos ha enseñado la revuelta es que ninguna transformación es posible si esta se realiza de espaldas a la gente y sin su participación.
Queremos trabajar por una ciudad inclusiva, que se haga cargo de la diversidad de sus habitantes, que esté libre de contaminación y que sea sustentable. Hecha está la invitación para quienes sientan que este proyecto les representa. A quienes vean renovada la esperanza en sus espíritus, a quienes vean en nosotros personas en las que se puede confiar. Es poco el tiempo, grandes las energías, y son tantas y tantas más las cosas que soñamos, pero emergerán de la ciudadanía, pues es nuestro objetivo que entre todos y todas construyamos la ciudad renovada que los talquinos y talquinas esperan.
La tarea es inmensa, el desafío enorme, siempre al lado de nuestros compañeros de lucha, creemos tener la fuerza femenina capaz de transformar nuestra realidad, como la mariposa de colores que sale del capullo, tal como Chile despertó para nunca más volver a dormirse, recuperando el municipio para el pueblo, porque en las calles nuestro pueblo se lo ganó.